Formación de dos nuevos grupos de oración.

Amigos estoy muy contenta de haber empezado a realizar el sueño que tenía con este proyecto al que quiero emplearme en esta etapa de mi vida a fondo. He estado pensando que sería conveniente formar dos grupos nuevos de oración.

El segundo grupo hacerlo solo de un cuarto de hora y que empieza de siete de la mañana hasta las siete y cuarto, que es el tiempo que se tarda en rezar un Santo Rosario. Ya os explicaré por si alguien no lo sabe o no lo recuerda bien como se reza el Rosario y lo que significa.

El tercer grupo que sea solamente de cinco minutos a las doce del medio día para rezar el Ángelus a María.

Así espero de estas tres formas cada cual se adapte a la que más le convenga por su horario y ganas, pues me gustaría que ninguna persona pasara un solo día de su vida sin rezar. Ahora voy a empezar a explicaros el rezo del Santo Rosario.

El Rosario se compone de cincuenta y cuatro cuentas, cinco grupos iguales de diez cuentas más una separada. En cada grupo se reza primero un Padre Nuestro por la cuenta separada y a continuación diez Ave Marías por las diez cuentas restantes del grupo. Así se hará con cada uno de los cinco grupos. Luego al final del todo se reza La Letanía, que ya explicaré.

Según los días de la semana, los lunes y los jueves se rezan los Misterios Gozosos, los martes y los viernes los Dolorosos y los miércoles, sábados y domingos los Gloriosos.

Esto es importante porque cada vez que se empiece a rezar un grupo de los anteriormente mencionados se dice primero el título del Misterio que toque antes de proceder con las Oraciones.

El Rosario es tan importante porque con todos los Misterios que vamos a rezar recorremos todos los momentos más importantes en la vida de Jesús y María, esta semana os voy a explicar los Misterios Gozosos y en próximas semanas os explicaré los Dolorosos y los Gloriosos, así que comenzamos.

- El Primer Misterio Gozoso: La anunciación del Ángel San Gabriel a María.

Estaba María rezando cuando se le apareció el Arcángel San Gabriel y le dijo: “Dios te salve María llena eres de gracia, el Señor es contigo y bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre. Tendrás un hijo y le pondrás por nombre Emmanuel, que significa Dios con nosotros.”

La Virgen se quedo aturdida al oír las palabras del Ángel, y ella le dijo:”¿Como va a ser eso si ni conozco hombre?” y el Ángel le contesto “No temas María pues has hallado gracia ante los ojos de Dios y el Espíritu Santo te cubrirá”

Entonces María tenia que dar su conformidad, y le dijo “He aquí la esclava del Señor hágase en mi según su palabra.” y en ese momento comenzó la Redención.

- El Segundo Misterio Gozoso: La visitación de la Santísima Virgen María a su prima Santa Isabel.

Se enteró María que su prima, que ya era mayor, estaba en estado de seis meses y ella llena de gozo marchó a la montaña donde vivía su prima para ayudarla en el momento del parto. No dudó en ir rápida a pesar de que se encontraba en estado ella también, y cuando llegó a casa de Santa Isabel y la recibieron, a Santa Isabel se le soltó la lengua diciendo “¿Como tu siendo la madre del Mesías vine a visitarme a mi casa?” y el niño que tenía en su vientre saltó de alegría al sentirse cerca de María.

María se quedó hasta que su prima tuvo el hijo, que fue el profeta más grande que ha habido en la historia sagrada, que es San Juan Bautista.

San Juan Bautista vino para preparar el camino del Mesías, el estuvo cuarenta días ya de mayor viviendo en el desierto alimentándose de saltamontes y de miel silvestre y cubierto su cuerpo con una tela de saco. Él predicaba “Allanar los senderos, preparar los caminos que el mesías está pronto de llegar.” y bautizaba con agua en el río Jordán diciendo “Arrepentíos y hacer penitencia, que el Mesías está a punto de llegar.”

- El Tercer Misterio Gozoso: El nacimiento del hijo de Dios.

Iban de camino José y María subida en una borriquita y se acercaba el momento del parto, San José iba nervioso y serio de ver que se acercaba el momento y no tenían sitio donde meterse. Llegaron a Belén pidieron posada y no se la dieron y entonces se metieron en un establo en compañía de los bueyes y las mulas.

Imaginaros la cara de San José de ver a su esposa que iba a tener el niño en un establo, corriendo cogió paja fresca y seca e hizo una cama para María, la cubrió con un manto y allí nació el hijo de Dios. Entró una luz por la ventana que iluminó el establo y aquel sitio se envolvió en una paz y en una alegría que parecía el Cielo. Y el Ángel del Señor se acercó a los pastores que estaban en el campo guardando los rebaños y les dijo: “Hosanna en el cielo, bendito sean los hombres de buena voluntad, seguid a esa estrella que ha nacido el Mesías, el hijo de Dios” y los pastores raudos se acercaron al portal a adorar al niño.

Allí también fueron tres magos de oriente que viendo una estrella nueva en el cielo la siguieron a ver que significaba y esa estrella les llevo al portal. Ellos eran Melchor, Gaspar y Baltasar.

- El Cuarto Misterio Gozoso: La presentación del niño Jesús en el templo y la purificación de la Virgen María.

Era costumbre que al poco tiempo de nacer el niño tenían que ir las madres y llevarlo al templo para la circuncisión Y allí en el templo tenían que llevar una ofrenda de gallinas, corderos o cerdos, pero María y José como eran tan pobres llevaban un par de tórtolas metidas en una jaula.

Allí en el templo vivía un anciano que se llamaba Zacarías y estaba ciego y siempre rezaba a Dios diciendo que no quería morirse sin ver al Mesías, y cuando llegaron la Virgen, San José y el niño al templo Zacarías se acercó a ellos y mirando hacia el cielo dijo: ”Señor ya puedo morirme en paz pues he conocido al Mesías” y luego dirigiéndose a María dijo: “Una espada de dolor te atravesará siete veces tu corazón.” Todas estas cosas María las guardaba en su corazón.

- El Quinto Misterio Gozoso: El niño perdido y hallado en el templo.

Había mandado el rey Herodes que se empadronaran todos sus súbditos para saber el número que había y entonces se formaron grandes caravanas que recorrían el país de un extremo a otro, de personas que tenían que regresar a su lugar de origen para empadronarse donde habían nacido.

En una de esas caravanas iba Jesús, María y José. Como era costumbre los hombres iban delante con las caballerías y la carga, los niños a continuación y al final las mujeres.

Durante el camino todos iban hablando y riendo y cuando hicieron la primera parada para descansar los animales y comer las personas, San José se dirigió a María y le dijo “¿Jesús esta contigo?” y María le contestó “No, yo pensaba que estaba contigo.” Entonces todos empezaron a buscarlo por la caravana y viendo que no lo encontraban todos les dijeron: “Id a buscarlo que nosotros os esperamos aquí.”

Imaginaros la angustia y la tristeza de ver que habían perdido al niño. Llegaron hasta Jerusalén, lo buscaron por toda la ciudad y no lo encontraron, y el único lugar que les quedaba por mirar era el templo, y al entrar en el templo le vieron subido en una tarima leyendo las Santas Escrituras a los ancianos, y entonces San José le dijo: “Hijo, ¿cómo has hecho esto a tu madre y a mí que te buscábamos desesperadamente?” y él les contestó “¿No sabéis que tengo que ocuparme de las cosas de mi Padre?” y ya Jesús se volvió con ellos.

Y el niño crecía en edad en sabiduría y en gracia ante los ojos de Dios y de los hombres.

- Letanía a la santísima virgen María:

Esta es la oración más bonita y alegre, porque son flores y piropos que le decimos los cristianos como madre nuestra, y dice así:

Señor, ten piedad

Cristo, ten piedad

Señor, ten piedad.

Cristo, óyenos.

Cristo, escúchanos.

Dios, Padre celestial,

ten piedad de nosotros.

Dios, Hijo, Redentor del mundo,

Dios, Espíritu Santo,

Santísima Trinidad, un solo Dios,

Santa María,

ruega por nosotros.

Santa Madre de Dios,

Santa Virgen de las Vírgenes,

Madre de Cristo,

Madre de la Iglesia,

Madre de la divina gracia,

Madre purísima,

Madre castísima,

Madre siempre virgen,

Madre inmaculada,

Madre amable,

Madre admirable,

Madre del buen consejo,

Madre del Creador,

Madre del Salvador,

Madre de misericordia,

Virgen prudentísima,

Virgen digna de veneración,

Virgen digna de alabanza,

Virgen poderosa,

Virgen clemente,

Virgen fiel,

Espejo de justicia,

Trono de la sabiduría,

Causa de nuestra alegría,

Vaso espiritual,

Vaso digno de honor,

Vaso de insigne devoción,

Rosa mística,

Torre de David,

Torre de marfil,

Casa de oro,

Arca de la Alianza,

Puerta del cielo,

Estrella de la mañana,

Salud de los enfermos,

Refugio de los pecadores,

Consoladora de los afligidos,

Auxilio de los cristianos,

Reina de los Ángeles,

Reina de los Patriarcas,

Reina de los Profetas,

Reina de los Apóstoles,

Reina de los Mártires,

Reina de los Confesores,

Reina de las Vírgenes,

Reina de todos los Santos,

Reina concebida sin pecado original,

Reina asunta a los Cielos,

Reina del Santísimo Rosario,

Reina de la familia,

Reina de la paz.

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,

perdónanos, Señor.

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,

escúchanos, Señor.

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,

ten misericordia de nosotros.

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.

Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.

Te rogamos nos concedas,

Señor Dios nuestro,

gozar de continua salud de alma y cuerpo,

y por la gloriosa intercesión

de la bienaventurada siempre Virgen María,

vernos libres de las tristezas de la vida presente

y disfrutar de las alegrías eternas.

Por Cristo nuestro Señor.

Amén.

Y para finalizar, el tercer grupo que os dije de rezar durante cinco minutos a las doce del medio día, rezar el Ángelus, que son cuatro Oraciones con tres Ave Marías.

- Primera Oración y Ave María:

El Ángel del señor anunció a María y concibió por obra y gracia del espíritu santo.

Dios te salve maría hija de Dios padre, purifica nuestros pensamiento.

Llena eres de gracia el Señor es contigo y bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús.

Santa María madre de Dios ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte, amén.

- Segunda Oración y Ave María:

He aquí la esclava del señor hágase en mí según tu palabra.

Dios te salve María madre de Dios hijo, purifica nuestras palabras.

Llena eres de gracia el Señor es contigo y bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús.

Santa María madre de Dios ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte, amén.

- Tercera Oración y Ave María:

Y el verbo se hizo carne y habitó entre nosotros.

Dios te salve María esposa de Dios Espíritu Santo, purifica nuestras obras y deseos.

Llena eres de gracia el Señor es contigo y bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús.

Santa María madre de Dios ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte, amén.

- Cuarta Oración:

Bendita sea tu pureza y eternamente lo seas, pues todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza.

A ti celestial princesa, Virgen Sagrada María yo te ofrezco en este día alma vida y corazón.

Miranos con compasión y no nos dejes Madre mía, amén.

En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo, amén.