miércoles, 17 de octubre de 2012

¿Estamos preparados para ser generosos al aceptar lo que Dios quiere para cada uno de nosotros?


Queridos amigos internautas,

al pensar en este tema me ha venido a la memoria el pasaje evangélico en el que Jesús iba caminando con sus discípulos cuando se le acercó un joven, y postrándose ante él le dijo:

- Maestro bueno, ¿qué tengo que hacer para alcanzar el reino de los cielos?

Jesús se sorprendió ante esta pregunta y le dijo:

- Cumple con los mandamientos que Dios mandó a Moises (No matarás, No cometerás adulterio, No robarás, No mentirás, No dirás falso testimonio, etc.). Y sobre todo amarás a Dios sobre todas las cosas y a tu prójimo como a ti mismo.

El joven le respondió a Jesús:

- Maestro, desde niño cumplo con todos los mandamientos.

Jesús le sonrió y le dijo:

- Entonces te falta una cosa por hacer. Vende todo lo que tienes, repártelo entre los pobres y ven y sígueme.

Al oír esto el joven frunció el ceño y se retiró, pues era muy rico. Tomando de nuevo la palabra Jesús le dijo a sus discípulos:

- Mirad, es más difícil que entre un rico en el reino de los cielos que un camello pase por el ojo de una aguja.

Los discípulos se asustaron al oír esas palabras y preguntaron:

- Maestro, ¿es que ningún rico se puede salvar?

Y jesús respondió:

- No es que los ricos no puedan entrar en el reino de los cielos, sino aquellos que ponen su corazón y su empeño en acumular riqueza y no en dar buen uso de ella. Pues todas las cosas de la Tierra, ya sean oro o piedras preciosas, al final se enmohecen y al final se convierten en polvo. Pero todos aquellos que abandonen a su padre y a su madre, a sus bienes y lo dejen todo por mí recibirán mil veces más alegría y satisfacción en la Tierra y luego serán recompensados infinitamente en el cielo.

Pedro tomó la palabra y dijo:

- Maestro, nosotros todos lo hemos abandonado por ti, lo hemos dejado todo.

Entonces Jesús les dijo:

- Por eso sois mis elegidos.

Si desmenuzamos un poco este pasaje del evangelio nos damos cuenta de que muchos de nosotros estamos en la misma situación que el joven. Cumplimos con la ley de Dios pero nos falta ese punto de entrega, ese saber arrancar y tirarnos al vacío con la esperanza de que Dios nos recoja. Qué fácil es dar de lo que nos sobra. Lo difícil es poner una meta o una línea roja en que digamos “hasta aquí”, y suprimir todas las cosas inútiles y todas las vanidades que nos rodean, que nada más que sirven para estar cada día más cómodos y creernos que somos poderosos. Cuantas menos cosas tengamos más felices seremos. Y las que tengamos que nos sirvan para ayudar a nuestro prójimo y hacer el bien a los que nos rodean.

Con esto no quiero decir que vivamos renunciando a todo, pues eso es únicamente para los elegidos (los sacerdotes, las monjas y demás personas del clero). Pero si nosotros en la medida de nuestros posibles aceptamos el lugar que Dios nos ha puesto y cumplimos con la misión que a cada uno de nosotros se nos ha encomendado, serviremos a Dios alegremente y nos sentiremos plenos al habernos esforzado en cumplir su santa voluntad.


La Virgen del Pilar

En estos días se ha celebrado la fiesta de la virgen del pilar, la patrona de España. Y en ese mismo día la tradición escogió esa fiesta como el día de la hispanidad (la raza), y en esta fecha conmemoramos el descubrimiento del continente americano por un ser elegido, Cristóbal Colón, un navegante austero y valiente que en tres caravelas pequeñas y remando fueron capaces de descubrir el nuevo mundo.

Yo sé que en muchos países de hispanoamérica celebran este mismo día la fiesta de la hispanidad, y aunque muchas personas hablan diciendo que ha habido luces y sombras en el descubrimiento de América lo cierto es que fue la unión de unos grandes pueblos americanos con la vieja España. España llevó lo mejor que tenía aquí: la lengua, la cultura, la religión, la civilización, pues construyó todo lo mejor que pudo en América. Y a cambio el pueblo americano les entregó tesoros para que se siguiera realizando la gran obra.

El motivo de escoger a la virgen del pilar como patrona de España fue según cuenta la tradición que después de morir Jesús los discípulos se repartieron por el mundo llevando la palabra de Dios, y Santiago apóstol y un grupito escogieron venir a evangelizar a España (de ahí el Camino de Santiago hasta Galicia, donde murió y fue enterrado) y al llegar a Zaragoza estaban un poco desanimados, pues veían que no conseguían todo lo que querían. Entonces se produjo el milagro. La Virgen María en cuerpo mortal, pues todavía vivía, se les presentó subida en una columna y desde allí los animó y los reconfortó. En ese lugar hicieron una iglesia que hoy es una gran basílica donde está en lo alto de una columna la pequeña imagen de la virgen del pilar. Y mirad, por si alguno no ha ido a visitarla y alguna vez vais a Zaragoza a su basílica, hay un lugar en la columna donde está la virgen que todos los peregrinos que pasan la besan. Y cuántos millones de personas habrán besado esa columna de mármol que está hundida del desgaste de tantos labios que se han posado sobre ella.

El Papa el día 12 de octubre ha proclamado que este año sea el año de la fe, para que durante este año hasta el próximo octubre de 2013 recemos y nos esforcemos y pidamos cada día por tener más fe. Y ha nombrado a María madre de la iglesia.

Bueno amigos, podemos sacar hoy la tarea de no olvidar de rezar por todos los que formamos el blog y por nuestros semejantes, para que se vayan solucionando los problemas que tenga cada cual, para que nuestras familias tengan salud y que el trabajo no falte en ninguna casa. Seamos generosos para que cada día nos entreguemos más a Dios y cumplamos la misión que Cristo espera de cada uno de nosotros.

Con cariño, Lali.

martes, 9 de octubre de 2012

Ángeles y Arcángeles


Queridos amigos internautas: hoy he pensado que podíamos reflexionar sobre los ángeles y los arcángeles.

¿Quiénes son los ángeles? Los ángeles son espíritus puros creados por Dios desde el comienzo de los tiempos. Su misión es alabar, bendecir a Dios y cantar sus alabanzas al toque de trompetas. Además de esto, su misión también es servir de mensajeros o intermediarios entre Dios y los hombres. Todos nosotros estamos rodeados de ángeles aunque no los veamos. Ellos son hermosos y bondadosos y resplandecen como el sol. Los hombres a través de los siglos, los han representados con dos alas para darles movilidad. No obstante, a pesar de todos los que nos rodean, Dios nos ha puesto a cada uno de nosotros un ángel desde el primer momento en que abrimos los ojos en este mundo hasta el momento en que entregamos nuestra alma a Él. Este Ángel todos lo conocemos como el Ángel de la Guarda o Ángel Custodio. Él es quien nos protege y ampara en todos los momentos de nuestra vida. Si alguna vez pecamos y ofendemos a Dios, entonces nuestro Ángel Custodio con sus manos se tapa sus ojos y nos abraza y envuelve con sus alas para que recapacitemos. En el momento en que reconocemos nuestro pecado y nos arrepentimos, él salta, canta y baila a nuestro alrededor lleno de júbilo.

Los arcángeles son una categoría superior de los Ángeles. Ellos están directamente detrás de Dios. Los arcángeles que la Iglesia Católica reconoce son tres y son San Miguel, San Gabriel y San Rafael. Ellos tres son los mensajeros directos de Dios.


Arcángel San Miguel


Este arcángel fue el que al principio de los tiempos, cuando los cielos estaban llenos de ángeles hubo una revolución, porque la mitad de ellos pensaron que eran tan poderosos y hermosos que podían ser como Dios. Ellos iban acaudillados por Luzbel, el más hermoso de todos los ángeles. En ese mismo instante, San Miguel por mandato divino, extendió su espada y se abrieron los cielos y cayeron al abismo y ahí pasaron de ser ángeles a convertirse en demonios por toda la eternidad. Esa es la guerra que desde un principio hay del bien contra el mal.


Arcángel San Gabriel


De los tres arcángel es el más conocido pues a él le encomendó Dios la mas hermosa de todas las misiones que fue visitar a la Santísima Virgen María. Era una mañana de primavera llena de luz y flores por doquier, cuando el arcángel San Gabriel se presentó ante María y le dijo: “Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre “. Al oír estas palabras María se ruborizó y le dijo que ella no conocía a varón alguno, a lo que el ángel le contestó: no temas María desde el principio Dios te hizo inmaculada y si tú quieres serás la madre del hijo de Dios, el Mesías prometido desde el antiguo testamento. El espíritu santo te cubrirá y engendrarás a un niño que será hijo del altísimo y le pondrás por nombre Jesús, a lo que María respondió: hágase en mí según tu palabra. En ese instante comenzó nuestra redención.

El arcángel San Gabriel también fue el que anunció a los pastores que había nacido el Mesías y también fue el que le habló en sueños a San José para que no repudiara a su esposa María por encontrarse en cinta y también le conto el milagro que Dios había hecho con ella.


Arcángel San Rafael


De acuerdo con el Libro de Tobías 5,4, Rafael fue enviado por Yaveh para acompañar a Tobías, hijo de Tobit, en un largo y peligroso viaje para conseguirle una esposa piadosa al joven. Ésta es Sara, quien había visto morir a siete prometidos debido a que un demonio, de nombre Asmodeo, estaba enamorado de la mujer y mataba al esposo en la noche de bodas.

En un principio Rafael se presenta como «Azarías, hijo del gran Ananías», pero al finalizar el viaje cura la ceguera de Tobit y se manifiesta como «el ángel Rafael, uno de los siete en la presencia del Señor».

Durante el viaje, da instrucciones a Tobías para pescar un pez, del que extraería las vísceras que usaría más tarde para alejar al demonio Asmodeo enamorado de Sara y curar la ceguera de su padre. Debido a esto, a Rafael se le considera protector de los novios o el noviazgo

Amigos a demás de todos los santos invisibles que nos rodean, entre nosotros hay muchas personas que son tan buenas y están dedicadas únicamente a ayudar a los demás y hacer el bien que decimos de ellas que son unos santos. Con esta idea os animo para que todos nosotros tomemos ejemplo de ellas e imitemos a los ángeles para que algún día puedan decir de nosotros que éramos unos ángeles.


Oración al Ángel de la Guarda

Ángel de mi guarda,
dulce compañía,
no me desampares
ni de noche ni de día
Las horas que pasan,
las horas del día,
si tú estás conmigo
serán de alegría
No me dejes solo,
sé en todo mi guía;
sin Ti soy chiquito
y me perdería
Ven siempre a mi lado,
tu mano en la mía.
¡Ángel de la guarda,
dulce compañía!

Bendita la luz del día
y el Señor que nos la envía.
¡Bendito el Niño Jesús,
bendita Santa María!

Con Dios me acuesto,
con Dios me levanto,
con la Virgen María
y el Espíritu Santo

Cuatro esquinitas
tiene mi cama,
cuatro angelitos
guardan mi alma
Todos le llevan al niño,
yo también le llevaré,
una jarra de manteca
y un tazón de dulce miel.
Todos le llevan al niño,
yo también le llevaré,
las cosas que a mí me gustan
para que goce Emmanuel.
Me ha contado Jesusito:
viene para que yo sea
un angelito en el cielo
y su amigo aquí en la tierra.
Yo le he dicho a Jesusito
que yo seré aquí en la tierra
su amiguito para siempre
y que en el cielo le vea.
Jesusito de mi vida,
eres niño como yo,
mira cuanto que te quiero
que te doy mi corazón.
¡Tómalo! ¡Tómalo!
Tuyo es, y mío no.


Amigos espero que esta oración se enseñéis a vuestros hijos, con todo mi cariño Lali.