miércoles, 29 de mayo de 2013

Recuerdos de los 30 días que he pasado en el hospital.


Queridos amigos internautas:

Os habrá extrañado que haya pasado tanto tiempo sin que os escribiera, pero es que he estado gravemente enferma sufriendo una cardiopatía y una insuficiencia en el riñón. Ha sido un tiempo difícil para mí. Pero no por ello he dejado de rezar por vosotros y por todas las intenciones de los que formamos este blog de oración, y os prometo que mientras me quede un hálito de vida seguiré rezando por todos vosotros.

Durante este tiempo de problemas y enfermedad y de sucederme cosas desagradables me he dado cuenta que de todo lo malo se saca una buena experiencia, pues me he dado cuenta del cariño con que me han tratado mi marido y mis hijos y todos los que me aprecian. Ellos se turnaban para darme de comer y acompañarme, pues yo sola no podía. He sentido la misericordia de Dios durante estos días en la sonrisa de una enfermera o en el trato amable del médico o simplemente en la limpiadora que venía a hacernos las camas. Todos entraban con una sonrisa animándonos y dándonos alegría, siempre de broma para levantar nuestro ánimo, y luego a media mañana todos los días venía el capellán del hospital y me traía la Sagrada Comunión.

Amigos, cuando estamos sanos y no hay problemas y pasamos por delante de un hospital no nos damos cuenta que allí dentro hay un mundo que sufre y que lucha por vivir. Todos colaboran de distinta manera, pero todo esto hace que se cree un gran ambiente de solidaridad entre personas que no se conocen para ayudarnos unos a otros y hacer la estancia en el hospital más agradable.

Como sabéis en cada habitación hay dos enfermos, y ahí se produce un milagro, que entre dos familias que no se conocen de nada llega a crearse un cariño y una ayuda mutua entre los enfermos y los acompañantes. Todos quieren colaborar para el bienestar del prójimo y parece que las cuatro paredes de la habitación se estrechan dándonos un fuerte abrazo.

Yo he tenido la suerte durante este mes de tener a varias compañeras que han sido excepcionales. La primera, Rosy, una chica joven casada con dos niños, tan alegre y positiva que me ayudó tantísimo en animarme. Ella era la alegría de la habitación, todo le gustaba, todo le parecía bien, en una palabra: era un modelo.

La segunda compañera, María del Valle, llegó con una fiebre grandísima y le costó mucho sacrificio ponerse buena, pero al final lo consiguió con la ayuda de todos. Me encantó su manera de ser y la de su familia, tan educados y tan agradables que en muchos momentos de debilidad y de tristeza me animaban para que no llorase y me decían que me pondría buena. En recuerdo de ella voy a poneros la historia de Nuestra Señora del Valle.

Y la tercera, Carmen, es la que menos tiempo ha estado conmigo, pues a las dos nos dieron de alta prácticamente juntas. Fue también muy agradable y cariñosa.

¡Qué voy a contar de Carmen la ATS, o de Félix, que siempre venían con el problema que tenía con las vías animándome! Solamente puedo dar las gracias a todas las personas que de una manera u otra me han socorrido o ayudado durante este tiempo.

Ahora ya estoy en mi casa. Todavía estoy débil y sigo en tratamiento, pero voy a intentar esforzarme al máximo para cada día trabajar con mis piernas para sentirme un poquito mejor, pues ahora me toca a mí devolver todo el cariño y el amor que me han dado mis hijos, mi marido y todos los que me rodean.

Os voy a poner la historia de la Virgen del Valle, que es muy famosa en España y en Argentina, y procuraré dentro de 15 días escribiros otra vez.


"En España

La advocación de Nuestra Señora del Valle es común en España, existiendo imágenes y ermitas en lugares como: Jerez de la Frontera, Sevilla, Toledo, Saldaña (Palencia), Mota del Cuervo (Cuenca), Llamas de Cabrera (León), Utrilla y Muriel de la Fuente (Soria), Cenicero (La Rioja), Vera (Almería), etc.

Alcalá del Valle

Patrona de la localidad de Alcalá del Valle. Venerada en la iglesia dedicada a la Virgen del Valle. Se celebra una romería en su honor el 1 de mayo, cuando la Virgen es trasladada en carreta tirada por bueyes y acompañada por todo el pueblo al convento de Caños Santos. Se celebra la festividad de la Virgen del Valle el 8 de septiembre en la que la patrona procesiona por las calles de la localidad habiéndosele dedicado una novena en los días previos.

Cenicero (La Rioja)

La ermita de la Virgen del Valle, situada en el centro de la localidad, es un edificio barroco del siglo XVIII, compuesto por una sola nave de tres tramos, capillas entre los contrafuertes y tiene un crucero cubierto de bóveda octogonal. La portada se sitúa a los pies y sobre ella una espadaña con tres vanos para campanas. Su parte más antigua es el presbiterio, construido en el Siglo XVI, cuando el edificio era casi cúbico, con contrafuertes en las esquinas, hasta que dos siglos más tarde fue reformado y ampliado. En el interior destacan dos bellos retablos del siglo XVIII dedicados a san Antón y san Isidro, así como el retablo central, con la imagen tallada de la Vírgen del Valle del siglo XIII, patrona de esta ciudad, a la que los ciudadanos de esta localidad profesan especial devoción.

Écija

La advocación de la Virgen del Valle es venerada en Écija (Sevilla), donde es patrona de la ciudad, debido a que la ciudad de Écija se encuentra situada en un valle. Se coronó canónicamente en una ceremonia por el arzobispo Carlos Amigo Vallejo, en 1999.

En Argentina

Catamarca

Catedral Basílica de Nuestra Señora del Valle (Catamarca, Argentina).

Según las creencias de los fieles católicos, la aparición de la venerada imagen de la Inmaculada Concepción, Nuestra Señora del Valle, tuvo lugar entre 1618 y 1620 en una gruta de Choya, Departamento Capital de la provincia de Catamarca, en el noroeste argentino. El pueblo de Choya al que se hace mención en los antiguos documentos estaba situado a 1 km del actual homónimo. Formaban la población de Choya españoles encomenderos y pueblos originarios en su gran mayoría cristianos. Vivían de la labranza y del pastoreo. Un originario de los encomendados al servicio de Don Manuel de Salazar, un día percibió voces. Eran indiecitas que caminaban recelosas, temiendo que alguien las sorprendiera. Llevaban lámparas y flores de la montaña. Como era de noche regresó a los ranchos de Choya. A la mañana siguiente regresó al paraje, y dio con las huellas y encontró un sendero que, se veía, era muy transitado. Caminó 5 km, remontando la quebrada cuando a unos 7 m de altura apareció un nicho de piedra bien disimulado. Al fin del nicho había rústicos asientos y restos de fogones, e incluso huellas de danzas. Trepó al nicho y al fondo encontró una imagen de la Virgen María. Era pequeñita, muy limpia, de rostro moreno y manos juntas. Después de varios meses y de estar seguro de su descubrimiento, le cuenta todo a su amo. Le dice que la veneraban, que estaba allí entre las piedras, que era morenita como los indios y que por eso la querían y que él también había aprendido a quererla.

Catedral de la diócesis de Añatuya, dedicada a Nuestra Señora del Valle.

La Catedral Basílica de Nuestra Señora del Valle se encuentra en la ciudad de San Fernando del Valle de Catamarca, ciudad capital de la provincia de Catamarca. Las festividades de la Virgen del Valle se realizan el 8 de diciembre de cada año, en coincidencia con el día de la Inmaculada Concepción de María, y 15 días después de Pascuas. Ambas festividades convocan a miles de fieles marianos, cuyo fervor religioso los incita a realizar peregrinaciones hasta la ciudad de Catamarca desde otras ciudades y provincias del país, muchas veces a caballo o a pie.

Las procesiones en su honor son las más multitudinarias del Norte Argentino, razón por la cual, bajo la Presidencia de Perón, la Virgen fue declarada Patrona Nacional del Turismo."


Amigos, no dejemos nunca de confiar en la Divina Providencia y en su misericordia, y hagamos el firme propósito de rezar todos los días aunque sólo sea un padrenuestro y un avemaría por tantos enfermos y tanto personal sanitario que alivian nuestras enfermedades y dolores. Hasta dentro de 15 días si Dios quiere. Con cariño, Lali Maíz.